Deben existir nubes Cumulus y Cumulus Nimbus.

Los resultados de aplicación del reactivo son visibles e inmediatos, aproximadamente de 15 a 20 minutos para lograr la precipitación en el área blanco.

Es altamente eficiente para el combate de incendios.

Permite programar lluvias de auxilio, en vez de riegos de auxilio, en las zonas más alejadas donde los canales no han ofrecido el agua suficiente.

Los programas de reforestación tendrán un porcentaje muy elevado de éxito. 

Se aplica directamente en la nube con aviones que esprean los nucleantes.

Puede proporcionar movimiento o acarreo de nubes (a distancias que sean costeables) para colocarlas en los cauces o cuencas de las presas para que ahí sean estimuladas intensamente y precipiten rápidamente en lugares estratégicos para el llenado de presas o en circunstancias de nubes pequeñas.

Disminuye en un porcentaje aproximado de un 90% las granizadas, las cuales causan daños considerables.

Se ahorra un riego de pozo y hasta dos con el consecuente ahorro importante de energía eléctrica de 907 Kwatt por hectárea en cada riego.

El apoyo de las organizaciones gubernamentales llegan directamente al campesino sin intermediarios.

Funciona en nubes calientes de zonas con extrema sequía.

Permite juntar nubes medianas para formar una de mayor tamaño y provocar mayor actividad, humedad y ahorro de reactivo.

Por el control de nucleantes de nuestro sistema, se puede estimular y dosificar la precipitación para lluvia a terrenos temporaleros o de aguajes con estimulaciones moderadas, o bien precipitaciones intensas para llenados de presas. 

Por el mismo ahorro de riegos de pozo se abate la disminución del manto friático más el agua extra aportada por la lluvia.

Con nuestra tecnología, se aumentan las cosechas entre un 20% y un 50% en el área estimulada.